Dirigido tanto a padres como profesores  o cualquier profesional que trabaje con niños. A través de estas sencillas preguntas, conseguiremos unos datos muy valiosos para saber si un niño tiene riesgo de sufrir disfunciones en el sistema visual. Divido las preguntas en varios grupos dependiendo del origen.

Grupo óculomotor.

• ¿Mueve la cabeza de lado a lado al leer?
• ¿Se pierde cuando lee?
• ¿Relee palabras o líneas?
• ¿Necesita el dedo como indicador?
• ¿Tiene dificultades copiando de la pizarra?
• ¿Omite o se salta palabras pequeñas cuando lee?

Grupo acomodativo.

• ¿Tarda mucho al copiar de la pizarra?
• ¿Parpadea y se frota los ojos excesivamente al trabajar en cerca?
• ¿Le lloran mucho los ojos cuando realiza trabajos en cerca?
• ¿Se cansa con facilidad al realizar trabajos en visión cercana?
• ¿Evita o rechaza el trabajo en cerca, también la lectura?
• ¿Tiene baja comprensión lectora?

Grupo binocular.

• ¿Se tapa o cierra un ojo?
• ¿Desvía un ojo?
• ¿Gira o ladea la cabeza a un lado?
• ¿Siente confusión de lo que ve?
• ¿Se queja de ver doble?

Grupo de percepción.

• ¿Le cuesta reconocer pequeñas diferencias?
• ¿Su espacio de atención es corto?
• ¿Su escritura es pobre?
• ¿Lee en voz alta o mueve los labios?
• ¿Invierte letras, palabras o números?
• ¿Le cuesta recordar lo que lee?
• ¿Tiene mala memoria visual?
• ¿Su coordinación ojo-mano es baja?
• ¿Confunde derecha con izquierda?
• ¿Sus resultados académicos no alcanzan su potencial?

Cada grupo de preguntas corresponde a  una habilidad visual concreta. En el caso de que varias preguntas del mismo grupo sean positivas sospecharemos que el niño tiene dificultades en esta área en concreto y sería recomendable una evaluación visual completa.